La tienda de ropa “Urban Outfitters” decidió retirar del mercado su polémica sudadera “ensangrentada”, la cual desencadenó una controversia. Dicha sudadera con manchas rojas y el logotipo de la universidad Kent State de Ohio, donde en 1970 murieron cuatro estudiantes y otros nueve resultaron heridos a manos de la Guardia Nacional cuando protestaban contra la invasión estadounidense de Camboya..
Como en otras ocasiones,”Urban Outfitters” tuvo que ofrecer disculpas por vender una prenda controvertida y aclarar que la sudadera no aludía al suceso ni simulaba tener manchas de sangre, como se denunciaba en las redes sociales.
Esta sudadera se suma a una larga lista de prendas polémicas de Urban Outfitters que han ofendido a los más diversos colectivos. La última había sido una camiseta con la palabra ‘depresión’ estampada en varios tamaños y considerada una frivolización de ese transtorno.
La tienda está acostumbrada ya a pedir perdón por sus prendas. En su lista de ofendidos están: los irlandeses, las mujeres con problemas de peso, las asociaciones que luchan contra el alcoholismo, los judíos, y hasta el propio presidente de EE.UU.
En 2010, la cadena causo alarma al vender una camiseta en la que solo ponía y en letras grandes ‘Eat less’, es decir, “come menos”. A los irlandeses, las ofensas les llegaron en camisetas, gorras y tazas: “Bésame, estoy borracho, soy irlandés, o lo que sea” (‘Kiss me I’m drunk, or Irish, or whatever’).
En 2012, la tienda ofendió a una de las comunidades más poderosas de EE.UU., la judía. El enfado vino por una camiseta que llevaba bordada una estrella similar a la insignia con la que los judíos fueron marcados durante el Holocausto.
En el haber de la cadena ‘hipster’ también está un error de categoría presidencial: durante unos días en su página web uno de los colores en los que se podía encargar una camiseta básica era el “negro Obama”.