Después de varios cierres de escuelas en Waterbury por presuntas amenazas, funcionarios escolares organizan foro de seguridad

Los padres compartieron las preocupaciones con los funcionarios escolares y la policía. El objetivo es lograr que se implementen más medidas de seguridad.

WATERBURY, CT — En menos de un mes, varias escuelas de Waterbury han sido cerradas por informes de armas, incluido un incidente en el que en realidad se introdujo un arma cargada en el edificio. 

“Creo que un incidente es más que suficiente con todo lo que está sucediendo en la nación”, dijo Dannys Bin-Aine, padre de un estudiante de la Escuela Secundaria Crosby.

El lunes por la noche, los funcionarios escolares y la policía invitaron a los padres a compartir sus preocupaciones y aprender más sobre lo que se está haciendo para mantener seguros a sus hijos. 

“Creo que es importante que vengan los padres, que nos brinden sus comentarios y que nos expliquen el protocolo y las situaciones y cómo respondemos a las amenazas en la escuela”, dijo el jefe de policía de Waterbury, Fernando Spagnola.

Así como enseñarles lo que no se debe hacer cuando se presenten estas situaciones. La semana pasada, dos padres fueron arrestados por ingresar a Crosby High School durante un encierro. 

Las autoridades dijeron que todavía se está investigando cómo pudieron entrar, pero que la información falsa difundida en las redes sociales generó bastante pánico ese día. 

“Esa información creó mucha inquietud, lágrimas, ira, frustración, el miedo dominó en ese momento”, dijo la Dra. Verna Ruffin, superintendente de las Escuelas Públicas de Waterbury.

Algunos padres aún se enfrentan a algunos de esos sentimientos, por eso decidieron plantear todas sus preocupaciones con el objetivo de solicitar al distrito escolar la implementación de nuevas medidas de seguridad, como más policías en el campus y detectores de metales en las puertas. 

“Prefiero que un ParentSquare diga que se encontró un arma en la puerta, y no que se encontró un arma en un salón de clases”, dijo un padre.

Si bien hubo desacuerdo sobre cuáles deberían ser las soluciones, muchos estuvieron de acuerdo en que las discusiones sobre la seguridad escolar no pueden terminar aquí. 

“No sentimos que nuestros hijos estén seguros, nuestros hijos no se sienten seguros, los niños no quieren ir a la escuela”, dijo un padre.

Los funcionarios dijeron que los próximos pasos implicarán la participación continua de los padres. 

“Es fundamental escuchar la voz de los padres, cómo se sienten, las sugerencias que puedan tener”, dijo Ruffin.