Estados Unidos vivió el mayor día de protesta de su historia

Con una marea de manifestantes venidos de ciudades de todo el país, la marcha convocada en defensa de la diversidad, la igualdad y los derechos de las mujeres que se ven amenazadas con el nuevo presidente de EEUU, Donald Trump, ha superado las expectativas de los organizadores.

Grupos opositores y que rechazan la figura del magnate, iniciaron una “resistencia” que prometen extender las protestas a todo el país.

En New York, durante los disturbios, se lanzaron objetos frente al edificio del National Press Club, una persona resultó herida, mientras algunos jóvenes encapuchados con máscaras negras incendiaron contenedores de basura y rompieron vidrieras. Agentes antidisturbios intervinieron para normalizar la situación y dispersar a los activistas.

La policía ayudó a varias personas que trataban de asisitir al desfile de investidura y que han sido bloqueados por los manifestantes ubicados en la avenida Pennsylvania, en protesta contra el presidente electo de los Estados Unidos.

El alcalde demócrata de Nueva York, Bill de Blasio, estrellas de Hollywood como Mark Ruffalo y Alec Baldwin y el cineasta Michael Moore se destacaron en la protesta junto a decenas de miles de neoyorkinos, en inmediaciones de Columbus Circle, bajo una de las torres de Trump.

La imponente marcha contó con la adhesión de diversas organizaciones entre ellas grupos como Greenpeace y MoveOn. Algunas de las consignas coreadas que se escucharon fuerte fueron: “Sexista, racista y antigay. Donald Trump vete” y “Esta es la democracia”.

El resultado es la estimación nacional con más detalles disponible. Y su conclusión es que el sábado Estados Unidos vivió el mayor día de protesta de su historia. Su suma, que los profesores siguen actualizando, indica que el sábado marcharon contra el nuevo presidente entre 3.3 y 4.6 millones de personas en el país. Fue el récord: nunca tantas personas habían participado en protestas en un solo día.